Lo que debes saber antes de contratar un seguro de vida.

Los seguros en México representan solo el 2.2% del PIB, mientras que en Chile llegan hasta al 5%. A pesar de su poca penetración en la economía nacional, adquirir un seguro de vida es cada vez más una inversión imprescindible para cualquier persona que desee asegurar el futuro de su familia. 

Si estás pensando en contratar un seguro de vida, toma en cuenta esto:  

   1. No es lo mismo que un ahorro.  

No te confundas. Al adquirir un seguro de vida estás invirtiendo en la tranquilidad y estabilidad económica de tus seres queridos. A diferencia de los ahorros para el retiro (que se entregan al llegar a cierta edad), los seguros de vida lo que buscan es garantizar la disponibilidad de una suma de dinero en el caso de que llegues a faltar. Lo más usual es que este tipo de seguro cubra el fallecimiento del asegurado, pero también pueden incluir casos de invalidez permanente.  

   2. Busca paquetes hechos a tu medida.  

Es muy común que las personas cuenten con una póliza de seguro de vida que viene incluida al contratar una tarjeta de crédito o cualquier otro tipo de producto financiero. Sin embargo, la gran desventaja de estos seguros es que no consideran las necesidades específicas de cada persona. Al adquirir un seguro de vida debes tomar en cuenta aspectos como tu edad, estado de salud y actividad profesional.  

   3. Entre más temprano lo adquieras, mejor. 

La mayoría de los seguros de vida tienen una limitación de tiempo en sus coberturas, es decir que alrededor de los 70 años del asegurado pierden su vigencia. Lo ideal es comenzar a invertir en un seguro tan pronto sea posible. Esto permitirá acumular un mayor monto con más rendimientos.  

   4. No es lo mismo ahorrar en dólares que en UDIS. 

Invertir en UDIS (Unidades de Inversión) es una garantía de que tu dinero conservará su valor, ya que el valor de estas unidades se actualiza de acuerdo a la inflación del país. Las inversiones en dólares son un poco más riesgosas (por las fluctuaciones en el tipo de cambio). Consulta con tu agente cuál de estas opciones te conviene más.   

   5. Asigna beneficiarios con su nombre propio. 

Como mencionamos en una entrada anterior, es posible asignar beneficiarios de forma genérica, señalando únicamente su relación con el asegurado. Para evitar malos entendidos y garantizar el pago oportuno a tus beneficiarios, te recomendamos especificar sus nombres en la póliza del seguro.  

   6. Compara varias opciones.  

Tal vez parezca que es el mismo servicio, pero en realidad cada agencia de seguros ofrece opciones muy diferentes. Antes de que elijas una póliza, revisa bien la cobertura del seguro para saber si efectivamente cubre tus necesidades o no.  

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